Muchas pymes y pequeñas empresas prefieren contratar a un administrativo para que gestione la contabilidad financiera de su empresa; sin pararse a pensar los costes que supone la contratación de este trabajador y cuánto costaría delegar esta tarea a expertos en direcciones financieras y asesorías fiscales y laborales. De ahí, que en este post de Ruiz Prieto Asesores tratemos esta tema, preguntándonos por qué externalizar la contabilidad de tu empresa y la dirección financiera de la misma.

¿Qué diferencias existen entre un experto en dirección financiera, un contable y un asesor fiscal?
Antes de comenzar, hay que aclarar que dirección financiera y contabilidad en principio no es el mismo servicio, aunque una persona bien formada para asesorar a empresas debe contar con conocimientos técnicos de ambas materias.
Por contabilidad entendemos únicamente al sistema de control y registro de los gastos e ingresos y demás operaciones económicas que realiza una empresa o entidad.
Mientras que la dirección financiera es la parte encargada de planificar, ejecutar y analizar el intercambio de capital. Su objetivo es ayudar a tomar decisiones tanto a la dirección como al resto de departamentos. Lógicamente, la dirección financiera necesita los datos aportados por la contabilidad para llevarse a cabo. Sin la elaboración de la contabilidad, no podríamos realizar estudios de dirección financiera, ni tampoco tributar y optimizar el pago de los impuestos.
Asimismo, aparte de estos dos servicios, luego nos encontramos los servicios que realizan los asesores fiscales que son los encargados de optimizar los recursos financieros de una empresa para pagar menos impuestos de una forma legal. Para ello, también planifican, ejecutan y analizan, pero se concentran más en la parte fiscal que en la parte financiera.
¿Qué suelen hacer las empresas para gestionar estos trámites?
No obstante, aunque el tejido empresarial separe estos tres campos, los servicios de un buen profesional que entienda de las tres ramas le van a ayudar a optimizar todos sus recursos y a planificar adecuadamente su empresa.
Empiezo a comunicar este dato, porque las empresas suelen contratar a un contable-administrativo a tiempo completo, pero esta persona carece de conocimientos técnicos adecuados para gestionar, ejecutar y analizar tanto el intercambio de capital (dirección financiera) como la optimización del pago de impuestos (trámites administrativos fiscales).
Normalmente, el administrativo / contable carece de dichos conocimientos porque se buscan a una persona no experta en esos tres sectores; ya que este trabajador debe ser retribuido en función de sus competencias laborales y créeme no es lo mismo contratar un administrativo que un director que conozca perfectamente estos tres ámbitos empresariales.
Muchas de estas empresas cuando contratan nuestros servicios de asesoría fiscal, solamente quieren contratar dichos servicios; pero no quieren pagar para que gestionemos su contabilidad. Es cierto que si contratan este servicio, encarecerá nuestros honorarios, pero puede que si adquieras los tres servicios (contabilidad, dirección financiera y fiscalidad) sea menos costoso que un trabajador asalariado que realice este tipo de operaciones contables.
De ahí, que hayamos creado este post para que todas las pequeñas y medianas empresas se planteen en externalizar cada uno de estos servicios, ya sea la dirección financiera externa de la empresa, la contable o la fiscalidad. O llevar las tres al mismo tiempo al mismo profesional que esté instruido en estas materias.
¿Para qué sirve contratar los servicios de un profesional contable?
En este artículo estoy dando más importancia a la labor del contable, porque sin su función, tanto el asesor fiscal como el de dirección de empresas no pueden desempeñar adecuadamente su trabajo.
Lamentablemente, hoy en día comunicar que eres contable es algo peyorativo; mientras que si dices que eres director financiero, asesor fiscal o abogado de derecho tributario y financiero gozas de una mayor reputación social.
Esto es debido a que el contable puede ser sólo contable -realizar las operaciones de control y registro de los gastos e ingresos y demás operaciones económicas que realiza una empresa o entidad; pero también puede analizar esos datos.
Cuando el contable empieza a realizar ambas funciones (operaciones de registro y análisis), ya lo denominamos director financiero.
Para mí, la operación tediosa de registrar cada movimiento y operación que realiza la empresa o autónomo en sus libros contables es la más importante.
Si no contamos con una contabilidad fiel, toda planificación fiscal o financiera que realicemos más tarde va a padecer errores y; por tanto, los consejos que ellos aporten para tomar decisiones no están fundamentados en datos reales.
Por tanto, la dirección financiera es una parte muy importante en le empresa, que crea valor ya que mediante los análisis sabrás que departamentos son rentables en tu negocio; cuáles de ellos tienes que reformar; cuáles es el precio de venta de sus productos… No obstante, debe partir de una contabilidad fiel y exacta. De hecho, muchas empresas de dirección de empresas y asesorías fiscales prefieren ellos gestionar también la contabilidad; pues aunque sea más tedioso, no tenemos que supervisar correctamente para hacer el posterior análisis.
¿En qué consiste la dirección financiera externa?
Como ya hemos comentado anteriormente, la dirección financiera externa hace referencia a la posibilidad que tienen las propias empresas de contratar a un profesional externo para que ejerza las funciones y competencias de un director financiero; siendo autónomo (freelance) o servicio externalizado a través de una sociedad.
Lógicamente, al externalizar este servicio de la empresa, muchos empresarios temen que apenas tengan el control de este departamento. No obstante, mediante un buen contrato mercantil podemos pactar la forma de trabajar conjuntamente y; obligar a las partes que exista una comunicación fluida entre las partes.
La confianza no debe constituir un problema, puesto que estos profesionales están sujetos a códigos deontológicos donde se les obliga a guardar secreto profesional y; en caso de actuar en contra de su cliente pueden ser demandados por daños y perjuicios (incluso por vía penal en algunos casos).
Sin duda, la dirección financiera externa es un apoyo estratégico para cualquier empresa, que permite optimizar los recursos económicos y maximizar la creación de valor de la misma:
- Ayuda a las empresas a tomar decisiones financieras;
- El servicio debe ser completamente personalizado y adaptado a las necesidades personales de esa entidad, persona o empresa;
- Está orientada a optimizar los recursos de una forma adecuada;
- Así como de buscar les mejores formas de financiación para la empresa y negociar con las ya existentes en caso de necesidad.
- Todo ello para recuperar la inversión realizada en el menor tiempo posible y;
- Lograr dar más valor a la empresa.
¿Qué ventajas posee externalizar la contabilidad de tu empresa?
Externalizar los servicios de contabilidad y dirección de empresas (outsourcing financiero) tiene las siguientes ventajas:
- 1) Diagnosticar la situación de la empresa;
- 2) Cumplir sus obligaciones mercantiles de contar con libros contables fieles y exactos, listos para superar una auditoria en caso de ser necesario y de confeccionar el Impuesto de Sociedades;
- 3) Planificar y crear una hoja de ruta de los próximos eventos empresariales;
- 4) Tomar decisiones estando asesorado por un profesional de esta materia. De este modo, evitaremos futuras conflictos y de aparecer éstos serán más fáciles de defender ante un posible juicio;
- 5) Desarrollar planes de negocio y planes estratégicos;
- 6) Establecer objetivos y estrategias adecuadas para su empresa;
- 7) Revisar y analizar periódicamente la situación de su empresa;
- 8) Dicha revisión ayudará a mejorar el flujo de caja y reducir el gasto en financiación, así como reducir los costes de los servicios;
- 9) Contar con profesionales externos que le ayudaran a negociar con proveedores, entidades financieras y organismos públicos;
- 10) Planificar y realizar un seguimiento de las medidas propuestas para corregir aquellas que se desvíen de los objetivos a corto y medio plazo;
- 11) Podemos concentrar todos nuestros esfuerzos en otros aspectos clave para sacar adelante el negocio;
- 12) Evita el riesgo de contratar personal inadecuado.
En definitiva, externalizar la contabilidad de tu empresa y la dirección financiera de tu empresa te permitirá disponer de un profesional cualificado para tomar las mejores decisiones empresariales.

Enrique Ruiz Prieto
¡Hola! Soy abogado, consultor jurídico de empresas y asesor fiscal y laboral. Amo los viajes, las historias y las narraciones, la tecnología, la justicia social y el emprendimiento. Si te gustan estos temas, te invito a quedarte y leer mi blog, donde te enseñaré a comprender el apasionante mundo del derecho y el funcionamiento de las tecnológicas digitales.

