Hoy vamos a desarrollar dos conceptos fundamentales para cualquier ámbito de trabajo: comodidad y ergonomía. Ambos son términos que están vinculados con el derecho del trabajo; ya que el empresario según el artículo 19 del Estatuto de Trabajadores debe proporcionar y garantizar los medios adecuados para que el trabajador desarrolle sus servicios lo más confortablemente posible.
No obstante, estos dos conceptos no sólo son fundamentales desde un punto de vista jurídico, sino también desde un punto de vista económico y productivo; pues la calidad y el resultado de un trabajo bien dirigido, depende, tanto de la preparación y compromiso de los trabajadores; como de la calidad e idoneidad de los bienes, medios y herramientas puestos a su disposición.
Por ese motivo, una buena sintonía entre trabajo, herramientas y trabajadores es la condición esencial para alcanzar los mejores resultados.
¿Qué es la ergonomía? ¿Y la comodidad?
Podemos definir a la ergonomía como el estudio de las condiciones de adaptación de un lugar de trabajo, analizando las herramientas e instrumentos que utiliza; y las características físicas y psicológicas del trabajador o el usuario.
De este modo, con este estudio se permite que el trabajador sufra el menor número de secuelas posible al ejecutar la repetición de una acción.
Por su parte, el término de comodidad alude a una cosa que hace la vida más fácil.
Por tanto, son dos conceptos completamente distintos, pero interrelacionados entre sí.
¿Qué hay que tener en cuenta?
Lógicamente, lo primero a tener en cuenta es el análisis del lugar de trabajo y de su entorno laboral. Existen numerosos puestos en una misma empresa, pues cada uno de ellos deberá de ajustarse a la comodidad del trabajador y a la actividad que desempeña a lo largo de su jornada laboral.
Por ejemplo, en ambientes de oficinas, el trabajador debe estar confortable con su puesto de trabajo; teniendo que tener un mobiliario adecuado para que pueda adoptar las posturas adecuadas a la hora de desarrollar su actividad.
La elección de cada mobiliario teóricamente debe hacerse en función del trabajador que desempeña esa función; valorando si el mobiliario e instrumentos es adecuado en función de su edad, estatura, capacidades, etc. Lo fundamental es que permita los cambios de posturas.
Lo más importante a la hora de aplicar los principios ergonómicos correctamente, es que cuando se diseña un puesto de trabajo, éste debe estar perfectamente adaptado a la labor que se va a realizar allí. Por ejemplo, si se trata de una oficina que asesora jurídicamente a sus clientes; éste lugar debe contar con un buen sistema de iluminación; elevar la altura de una mesa de trabajo para que la persona no tenga que inclinarse innecesariamente y; disponer de un amplio escritorio que permita tener a su disposición un PC, así como libros y documentos.
¿Cuál es el objetivo de la ergonomía?
Fundamentalmente, la ergonomía presenta dos objetivos:
- Proteger la salud de las personas (confort físico).
- Mejorar el grado de satisfacción de los usuarios (confort psicológico).
¿Cuáles son los beneficios?
Si se aplica la ergonomía, todos los elementos obtienen beneficios:
- Los empleados van a trabajar con mejores condiciones lo que les puede hacer más felices y más productivos. Además, van a trabajar en unas condiciones mejores, más sanas y seguras y no acabaran odiando tanto su trabajo.
- Para las empresas también es beneficioso, puesto que sus trabajadores serán más productivos y eficientes; y, además, reducirá las bajas y absentismos laborales (con los consiguientes ahorros).
- Incluso el consumidor también obtiene beneficios; porque el resultado final del producto se verá mejorado en su calidad y el servicio prestado será un servicio mejorado.
Algunos datos estadísticos
Aunque parezca una tontería, la ergonomía no se aplica en todos los puestos de trabajo. Según informes estadísticos, el 55% de las personas que trabajan en oficinas presentan problemas posturales y un 7% sufre bajas a causa de este motivo.
De hecho, el dolor de espalda constituye la segunda causa de absentismo laboral, ascendiendo al primer puesto en caso de que sean menores de 45 años.
Además, una falta de ergonomía también ocasiona consecuencias psicológicas como dificultad de concentración, irritabilidad, desmotivación…
Es curioso como muchas encuestas laborales recogen como principales quejas de los trabajadores que su puesto de trabajo no es confortable, haciendo referencia a la mesa o a la silla de trabajo; y también al ambiente térmico, a la falta de espacio, a la iluminación y a la privacidad.
Por ese motivo es recomendable comprar un mobiliario adecuado, como los que ofrece Teamwork.es.
¿Cuáles es el ámbito perfecto para una oficina?
Por ejemplo, en una oficina el mobiliario nos tiene que servir como herramienta para centrarnos en nuestras tareas y objetivos.
Para ello, es fundamental disponer de una mesa limpia, donde tengamos encima de ella los elementos necesarios para desempeñar la tarea que estamos desarrollando. Asimismo, es bueno disponer de elementos que nos permitan organizar el diferente material y mantener recogido el puesto de trabajo, como lapiceros, bandejas, grapadoras, etc.
Por su parte, la silla es otro de los elementos vitales para desempeñar nuestra actividad; pues es el soporte donde situamos nuestro cuerpo para pasar varias horas concentrados. Una silla ergonómica debe disponer de numerosos mecanismos para que podamos adaptarla en función de nuestra estatura y constitución. Del mismo modo, es recomendable que cuente con ruedas y sea movible, pues nos ayudará a levantarnos cuando haga falta o desplazarnos hacia otro lugar.
Los diferentes sistemas de almacenaje (cajoneras, armarios o librerías) nos ayudarán a mantener un espacio ordenado, limpio y agradable. Es fundamental tener un espacio organizado pues nos ayudará a concéntranos mejor, evitando posibles distracciones.
Respecto a los colores, tonos claros en general, con detalles de color en puntos muy concretos y que nos sirvan para humanizar la oficina.
Si necesitamos lugares para organizar reuniones de equipo, es imprescindible organizar mesas para que ningún miembro de la espalda a otro. Por ejemplo a través de mesas redondas, o a través de varias mesas rectangulares emplazadas en forma de U.
Enrique Ruiz Prieto
¡Hola! Soy abogado, consultor jurídico de empresas y asesor fiscal y laboral. Amo los viajes, las historias y las narraciones, la tecnología, la justicia social y el emprendimiento. Si te gustan estos temas, te invito a quedarte y leer mi blog, donde te enseñaré a comprender el apasionante mundo del derecho y el funcionamiento de las tecnológicas digitales.