El acoso laboral no solo afecta la salud emocional del trabajador: también deteriora el clima laboral, reduce la productividad y expone a la empresa a graves sanciones legales. Desde Ruiz Prieto Asesores, como abogados especializados en derecho laboral y mediación de conflictos, queremos explicar cómo actuar si sufres acoso laboral, ya seas trabajador, compañero, empresario o responsable de recursos humanos.
Actualmente, todas las empresas están obligadas a disponer de un canal de denuncias anónimo conforme a la Ley 2/2023, especialmente si tienen más de 50 trabajadores. Ignorar estas obligaciones puede derivar en responsabilidades civiles, administrativas e incluso penales.

¿Cómo actuar si sufres acoso laboral y eres trabajador?
Si estás siendo víctima de acoso laboral (mobbing), es fundamental actuar con inteligencia emocional y apoyo legal. A modo de ejemplo, pensemos en Laura, una diseñadora gráfica que comenzó a notar cambios en el trato de su supervisor tras negarse a hacer horas extras sin remuneración. Recibía comentarios sarcásticos en público, su trabajo era desvalorizado constantemente y se le retiraron responsabilidades sin justificación. Laura empezó a guardar correos, capturas de pantalla y se visitó con su médico de cabecera, quien le diagnosticó ansiedad.
En estos casos, lo primero es documentar todos los hechos. Correos electrónicos, mensajes de texto, informes médicos, grabaciones legales (si están permitidas en tu jurisdicción), y cualquier otra evidencia que demuestre un trato degradante, humillante o reiterado serán cruciales.
También es clave evitar el enfrentamiento directo. Aunque es humano querer responder o encarar al acosador, lo más prudente es mantener la calma, dejar constancia formal de lo ocurrido y buscar asesoramiento legal antes de tomar decisiones que puedan ser contraproducentes.
Si tu empresa tiene implantado un protocolo contra el acoso, debes utilizar el canal interno de denuncias. Laura, por ejemplo, decidió rellenar el formulario anónimo que encontró en la intranet de su empresa. Ese simple paso obligó a la compañía a investigar los hechos y activar un procedimiento.
Al mismo tiempo, contar con asesoramiento legal permite valorar si conviene acudir directamente a la Inspección de Trabajo, presentar una demanda judicial o agotar primero la vía interna. En casos graves o urgentes, como cuando la salud del trabajador se ve seriamente afectada, es posible solicitar medidas cautelares o incluso una baja médica por contingencias profesionales.
Por tanto, si estás siendo víctima de acoso laboral (mobbing), es fundamental actuar con inteligencia emocional y apoyo legal:
- Documenta los hechos: guarda correos electrónicos, mensajes, partes médicos y cualquier prueba del trato degradante, humillante o reiterado.
- Evita el enfrentamiento directo: aunque es natural querer defenderte, es mejor dejar constancia formal y buscar apoyo legal antes de reaccionar impulsivamente.
- Utiliza el canal interno de denuncias: si tu empresa tiene implantado un protocolo contra el acoso, deberías rellenar el formulario del canal de denuncias anónimo que debe estar disponible. Esto activa el procedimiento interno y obliga a la empresa a investigar los hechos.
- Busca asesoramiento legal: contacta con un abogado laboralista para valorar si es mejor presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo, interponer demanda judicial o agotar primero la vía interna.
- Solicita medidas cautelares o baja médica si es necesario: si el acoso afecta a tu salud, puedes acogerte a la baja laboral por contingencias profesionales o solicitar una reubicación temporal.
¿Cómo actuar si un compañero sufre acoso laboral?
No ser la víctima directa no exime de responsabilidad ética ni profesional. Imaginemos a Jorge, que trabaja en una consultora donde observa cómo su compañera Pilar es interrumpida constantemente en las reuniones, criticada en público por detalles menores y excluida de proyectos importantes. Jorge decidió no quedarse al margen: la escuchó con atención, sin emitir juicios, y le recomendó utilizar el canal interno de denuncias, asegurándole que todo el proceso era confidencial.
En muchos protocolos de empresa, se permite también que los testigos directos de acoso presenten una denuncia. Este apoyo puede marcar la diferencia entre el silencio y la acción. Eso sí, es fundamental no propagar rumores ni hacer comentarios que agraven la situación. La confidencialidad es clave para proteger a todas las partes implicadas mientras se investigan los hechos.
Si sospechas que un compañero está sufriendo acoso, puedes hacer:
- Escucha sin juzgar: muchas víctimas temen no ser creídas. Brinda apoyo emocional.
- Anímale a usar el canal de denuncias interno: recuérdale que puede hacerlo de forma confidencial y sin represalias.
- Puedes presentar una denuncia como testigo: en muchos protocolos de acoso se permite denunciar conductas que presenciaste directamente.
- No propagues rumores: evita contribuir a la toxicidad laboral. La confidencialidad protege tanto al denunciante como al denunciado mientras se investiga.
¿Cómo actuar si un trabajador de tu empresa sufre acoso laboral?
Si eres empresario, gerente o responsable de RR.HH. y te notifican una situación de acoso, tu deber no es solo moral, sino legal. Por ejemplo, en una empresa tecnológica de tamaño medio, un desarrollador acusó a su jefe de trato vejatorio. La dirección activó inmediatamente su protocolo interno, nombró un instructor externo y garantizó que tanto denunciante como denunciado pudieran presentar sus versiones en un entorno seguro.
Un protocolo bien diseñado asegura confidencialidad, protección contra represalias y apoyo a las personas afectadas. Además, permite canalizar la situación hacia una solución legal y constructiva. Escuchar a ambas partes, abrir un proceso de mediación si procede y documentar todas las actuaciones, incluso si el acoso no se confirma, es esencial.
Muchas pymes no disponen de un departamento jurídico interno. En esos casos, es recomendable apoyarse en asesoría externa. En Ruiz Prieto Asesores ayudamos a las empresas no solo a crear estos protocolos, sino también a ejecutarlos correctamente e incluso a intervenir en procesos penales si el caso lo requiere.
Por consiguiente, si eres empresario, gerente o responsable de RR.HH. y te notifican una situación de acoso:
- Activa de inmediato el protocolo de acoso laboral, que debe incluir la designación de un instructor imparcial y un procedimiento garantista.
- Garantiza la confidencialidad de todo el proceso. Las represalias están prohibidas por ley y pueden generar graves sanciones.
- Seguridad para las Víctimas: Un protocolo bien diseñado garantiza confidencialidad, protección contra represalias y apoyo a las personas afectadas, proporcionándoles un espacio seguro para denunciar y resolver sus problemas.
- Escucha a ambas partes y abre un proceso de mediación si procede, siempre con consentimiento voluntario.
- Documenta todas las actuaciones: tanto si el acoso se confirma como si no, el expediente debe estar bien sustentado.
- Apóyate en asesoría jurídica externa si careces de recursos internos. En Ruiz Prieto Asesores, acompañamos a empresas en todo el proceso: desde la elaboración de protocolos hasta la mediación o los informes al Ministerio Fiscal en casos graves.
¿Qué debe hacer una empresa para evitar que estos hechos ocurran?
La mejor estrategia es la prevención. Disponer de un protocolo actualizado, adaptado al tamaño y sector de la empresa, no es un trámite más, sino una herramienta vital. Por ejemplo, una empresa de logística con 60 empleados decidió implantar un canal de denuncias accesible desde el móvil, lo que facilitó que un mozo de almacén pudiera denunciar una conducta inadecuada de forma segura.
Además, la formación periódica sobre igualdad, respeto y riesgos psicosociales es fundamental. No se trata de simples charlas: son espacios para construir una cultura de tolerancia cero al acoso.
La evaluación de riesgos psicosociales ayuda a identificar zonas con tensión antes de que el problema estalle. Si se detecta un patrón repetido de bajas en un departamento, por ejemplo, puede ser señal de un entorno hostil.
Contar con mediadores y asesores especializados que intervengan ante los primeros indicios también puede evitar que la situación escale.
Por tanto, la prevención es la mejor defensa. Algunas medidas esenciales:
- Disponer de un protocolo de acoso laboral actualizado, adaptado al tamaño de la empresa y al sector.
- Implantar el canal de denuncias anónimo obligatorio según la Ley 2/2023, accesible a todos los trabajadores. Es obligación del administrador de una sociedad garantizar que sus empleados no sufran acoso laboral. Esta responsabilidad se deriva de diversas normativas legales que imponen deberes específicos a los empleadores en cuanto a prevención, intervención y sanción en casos de acoso. La implementación de un protocolo de actuación permite mitigar este riesgo y, además, puede eximir de responsabilidad al administrador al demostrar que ha adoptado todas las medidas de diligencia necesarias.
- Formación periódica a la plantilla sobre igualdad, respeto y prevención de riesgos psicosociales.Incorporar formación y medidas preventivas fomenta una cultura de respeto y tolerancia cero hacia el acoso, reduciendo significativamente el riesgo de que ocurra
- Evaluación de riesgos psicosociales: identificar zonas o departamentos con mayor tensión o conflictividad puede ayudar a actuar antes de que aparezca el acoso.
- Contar con mediadores y asesores especializados que intervengan ante los primeros indicios.
¿Y si debes denunciar a una pequeña empresa de menos de 5 trabajadores?
Aunque la Ley 2/2023 establece que el canal de denuncias obligatorio solo se aplica a empresas con más de 50 empleados, todas las empresas, sin importar su tamaño, están obligadas a prevenir el acoso.
En una pequeña carpintería familiar con cuatro empleados, uno de los operarios denunció trato denigrante por parte del encargado. Como el dueño no tomó medidas, decidió acudir a la Inspección de Trabajo. Incluso en microempresas, el empleador sigue siendo responsable de garantizar un entorno libre de acoso y debe actuar si conoce o debería conocer los hechos.
Desde Ruiz Prieto Asesores te ayudamos a presentar las pruebas correctamente y activar mecanismos de protección para que no te expongas innecesariamente.
¿Se puede rastrear si el acoso laboral también está presente en Internet?
Sí, el acoso laboral puede extenderse al entorno digital, lo que se conoce como ciberacoso laboral. Esto puede incluir insultos, amenazas, suplantaciones de identidad o difusión de información privada a través de correos, redes sociales o mensajería instantánea.
Gracias a herramientas como YouForgotMe, es posible rastrear estas conductas en Internet y obtener informes técnicos que se pueden aportar como prueba en un procedimiento judicial o administrativo.
Conclusión
El acoso laboral es un fenómeno complejo que requiere respuestas rápidas, eficaces y bien documentadas. Tanto si eres trabajador, compañero o empresario, no estás solo. Desde Ruiz Prieto Asesores, como abogados laboralistas y mediadores, podemos ayudarte a gestionar estas situaciones con el enfoque más adecuado: jurídico, ético y restaurativo.
Recuerda: el canal de denuncias no es un trámite decorativo, es un derecho y una obligación legal. Usarlo correctamente puede marcar la diferencia entre silenciar el problema o solucionarlo a tiempo.

