La pensión que se debe pasar en un divorcio puede variar según las leyes y regulaciones específicas de cada país, estado o jurisdicción. Además, la decisión puede depender de diversos factores, como la duración del matrimonio, los ingresos y recursos financieros de ambas partes, la capacidad de cada cónyuge para mantenerse económicamente y las necesidades de los hijos, si los hubiera.
Es por ello, por lo que hemos redactado esta entrada en el blog para asentar los puntos más importantes a tener en cuenta.
Siempre lo aconsejable es acudir a un despacho de abogados especializados en la materia, como la firma Abogados Matrimonialistas en Valladolid, expertos en estos asuntos de derecho de familia.
¿Qué tipos de pensión podemos solicitar en caso de divorcio?
Fundamentalmente, hay dos tipos principales de pensiones que se pueden considerar en los procesos de divorcio:
- Pensión alimenticia o compensatoria: Esta es una cantidad de dinero que un cónyuge puede tener que pagar al otro para ayudar a mantener su nivel de vida después del divorcio. La duración y el monto de esta pensión pueden variar y, a menudo, se establecen en función de factores como la duración del matrimonio y las contribuciones financieras y no financieras de cada cónyuge al matrimonio.
- Pensión de manutención de hijos: Si hay hijos involucrados en el divorcio, es probable que el cónyuge no custodio (el que no tiene la custodia principal de los hijos) deba pagar una pensión de manutención de hijos. Esta pensión está destinada a cubrir los gastos relacionados con la crianza de los hijos, como la educación, la atención médica y otras necesidades diarias.
¿A qué tipo de pensión económica puede tener derecho una mujer divorciada? ¿Y un hombre?
La asistencia económica compensatoria se configura como una prestación financiera que puede ser solicitada por uno de los cónyuges al otro en situaciones de divorcio o separación. Su objetivo principal es rectificar desigualdades financieras que surgen tras la disolución del matrimonio, especialmente cuando una de las partes experimenta una reducción en sus ingresos o en su capacidad para generarlos.
La responsabilidad de conceder una prestación compensatoria, así como su monto, estará sujeta a las circunstancias específicas de cada caso, como la duración del matrimonio, la edad de los cónyuges y otros factores que se analizarán detalladamente. Por tanto, no existe una obligación automática de otorgar esta asistencia económica en todos los casos.
Además, los roles sociales hhan cambiado en los ultimos tiempos. Gracias a ello, tenemos que tener presentes que, en España, tanto un hombre como una mujer pueden ser beneficiarios de una pensión compensatoria después de un divorcio. La ley de familia en España no establece restricciones de género en relación con la concesión de la pensión compensatoria, pues su finalidad es corregir desequilibrios económicos que han sido provocados durante el matrimonio, independientemente del género de las partes involucradas.
Aunque a nivel social, noamlemente, se desconoce que el hombre puede solicitar una pensión compensatoria, lo que es cierto es que si un hombre cumple con los requisitos y demuestra la necesidad de recibir apoyo financiero tras el divorcio, puede recibir una pensión compensatoria de su ex esposa en España.
¿Cuál es la duración de la pensión compensatoria?
La duración de la pensión compensatoria en un divorcio o separación puede variar y suele depender de varios factores, incluyendo las leyes locales y las circunstancias específicas del caso.
En España, la duración de la pensión compensatoria se establece de manera que permita al cónyuge receptor recuperarse económicamente y alcanzar una situación financiera más estable. Para ello, se tiene en cuenta los siguientes factores:
- Duración del matrimonio: En general, matrimonios más largos pueden dar lugar a períodos de pensión compensatoria más prolongados.
- Edad de los cónyuges: La edad de los cónyuges puede influir en la duración de la pensión, ya que se puede considerar que un cónyuge más joven tiene más tiempo para recuperarse económicamente.
- Capacidad para la autosuficiencia: La pensión compensatoria a menudo se otorga hasta que el cónyuge receptor sea capaz de ser autosuficiente desde el punto de vista económico. Esto puede depender de factores como la capacitación laboral, la educación y las oportunidades de empleo.
- Cambios en las circunstancias: Cambios significativos en las circunstancias, como un cambio en los ingresos o la situación laboral de cualquiera de los cónyuges, pueden dar lugar a modificaciones en la duración de la pensión compensatoria.
En consecuencia, la pensión compensatoria puede ser de carácter temporal o indefinido, sin que exista un plazo estándar predeterminado por la ley. La duración de esta prestación suele determinarse tomando en cuenta los factores reseñados anteriormente, siendo uno de los factores más importantes la situación económica de ambos sujetos. Es crucial señalar que la concesión de esta pensión no es automática ni obligatoria, sino que se decide en función de las circunstancias específicas de cada caso, estableciendose una temporalidad o establecviendose un caracter indefinido. En este ultimo caso, no quiere decir que la otra persona que paga a su ex conyuge, no pueda instar al juez reviusar la pensión, pero tendrá que solicitarlo via judicial.
¿Cómo se calcula la cuantía de la pensión compensatoria?
El cálculo de la pensión compensatoria en un caso de divorcio es un proceso complejo y está sujeto a múltiples factores.
El monto de la pensión dependerá de las necesidades del solicitante y de las posibilidades económicas del cónyuge responsable de realizar el pago. Algunos de los factores considerados en el cálculo incluyen la duración del matrimonio, la edad y salud de los cónyuges, su formación y capacitación profesional, la dedicación a la familia durante el matrimonio, las responsabilidades familiares (especialmente la custodia de hijos menores), los ingresos y patrimonio presentes y futuros, y la contribución de cada cónyuge al sostenimiento de la familia y al trabajo doméstico.
Cabe destacar que el cálculo de la pensión compensatoria se lleva a cabo de manera individualizada para cada caso, teniendo en cuenta todas las circunstancias relevantes. Por esta razón, se recomienda buscar el asesoramiento de un abogado especializado en derecho de familia para obtener orientación personalizada sobre el tema.
¿Cuándo no hay derecho a pensión compensatoria?
Cada caso es único y no hay dos situaciones idénticas. No existe automáticamente el derecho a una pensión compensatoria, especialmente cuando la ruptura no genera desequilibrio económico en ninguno de los cónyuges o cuando ambos mantienen una situación económica similar a la previa al divorcio.
Aunque no se puede establecer un criterio general para determinar cuando no hay derecho a la pensión compensatoria, un ejemplo podría ser una pareja joven de cuarenta años, casados por cinco años, sin hijos, ambos con educación y empleo estable, donde sería improbable que el juez otorgara una pensión compensatoria para alguno de ellos.
¿La pensión compensatoria es revisable?
Sí, la pensión compensatoria en España es revisable. Esto significa que, en determinadas circunstancias, las partes involucradas o el tribunal pueden solicitar una revisión de la pensión compensatoria establecida originalmente. La revisión puede ser solicitada si se producen cambios significativos en las circunstancias que llevaron a la fijación de la pensión.
Algunos de los cambios que podrían dar lugar a la revisión de la pensión compensatoria incluyen:
- Cambio en la situación financiera: Si cualquiera de las partes experimenta cambios significativos en sus ingresos o gastos.
- Nuevos compromisos financieros: Si el beneficiario de la pensión compensatoria contrae nuevas obligaciones financieras o si el que paga experimenta dificultades económicas.
- Cambios en la salud: Si la salud de alguna de las partes sufre cambios sustanciales que afectan su capacidad para mantenerse económicamente.
- Matrimonio o convivencia: En algunos casos, la pensión compensatoria puede cesar o modificarse si el beneficiario se vuelve a casar o inicia una nueva convivencia de pareja.
¿Cómo se puede solicitar la pensión compensatoria? ¿Necesariamente hay que acudir a la vía judicial?
La solicitud de la pensión compensatoria puede variar según las leyes y procedimientos legales de cada jurisdicción. Sin embargo, en muchos casos, la solicitud se realiza dentro del proceso de divorcio o separación. Aquí hay algunas opciones comunes:
- Acuerdo entre las partes: En algunos casos, las parejas pueden llegar a un acuerdo mutuo sobre la pensión compensatoria sin recurrir a la vía judicial. Esto puede formalizarse mediante un acuerdo de divorcio o separación, que luego debe ser aprobado por un tribunal. Normalmente, se recoge en el documento denominado convenio regulador, que es un documento en el cual las partes acuerdan los términos y condiciones relacionados con su divorcio, incluyendo aspectos como la pensión compensatoria, la custodia de los hijos, la pensión alimenticia y la división de propiedades y activos. Aunque el convenio sea aprobado por las partes, en la posterior ratificación ante el juzgado, éste revisará el convenio para asegurarse de que cumple con las leyes aplicables y que los acuerdos son justos y razonables, reservándose el derecho de solicitar cambios.
- Mediación: La mediación es un proceso en el cual un mediador neutral ayuda a las partes a llegar a un acuerdo. A través de la mediación, las parejas pueden discutir y negociar los términos de la pensión compensatoria sin tener que ir directamente a la corte.
- Proceso judicial: Si no es posible llegar a un acuerdo fuera de la corte, la solicitud de pensión compensatoria se realizará a través del proceso judicial de divorcio o separación. Uno de los cónyuges presentará la solicitud ante el tribunal y se seguirá un procedimiento legal para determinar si la pensión es necesaria y en qué términos.
En muchos casos, la vía judicial es necesaria para formalizar y hacer cumplir la pensión compensatoria, especialmente si las partes no pueden llegar a un acuerdo por sí mismas. Es importante consultar con un abogado especializado en derecho de familia para comprender los procedimientos específicos de su jurisdicción y obtener asesoramiento legal adecuado.
Enrique Ruiz Prieto
¡Hola! Soy abogado, consultor jurídico de empresas y asesor fiscal y laboral. Amo los viajes, las historias y las narraciones, la tecnología, la justicia social y el emprendimiento. Si te gustan estos temas, te invito a quedarte y leer mi blog, donde te enseñaré a comprender el apasionante mundo del derecho y el funcionamiento de las tecnológicas digitales.